4.3.- El documental. Tipos de documentales. El documental como documento cultural.

Los humanos nos relacionamos de muchas formas con la historia a través de libros o textos, pinturas, grabados, fotografías, narraciones orales, cine, televisión, video, entre otros. En cualquiera de los mencionados estamos en presencia de una elaboración y ordenación de los datos para generar la visión que quieren exponer. En lo referente a lo audiovisual, en un comienzo el cine, y luego junto con el video, se establece una nueva forma de conectarse con la historia, tanto en la ficción como en el documental. En los dos se construye el pasado para mostrarnos una realidad igual de válida que quienes escriben historia. Especialmente nos centraremos en el documental como instrumento metodológico que permite vislumbrar de manera audiovisual la realidad histórica de manera fiable, además lo hace aportando con diferentes estéticas y narrativas que nos pueden mostrar la historia de una forma que los textos no.

El cine documental se encuentra en auge. Se puede apreciar en la constante demanda de nuevos profesionales y de su emisión en las cadenas de televisión. Unos de los momentos de mayor esplendor de este género son en los períodos de entreguerras. En ellos, se mostraba la realidad vivida durante la guerra, la dureza y angustia. Tenían gran reclamo por el pueblo, ya que otorgaban la posibilidad de dar testimonio a sus historias. Conocemos este género de documental desde los propios hermanos Lumiére y su invención del cinematógrafo. De hecho, sus primeros filmes eran documentales. “La salida de los obreros de la fábrica”, el primer filme de los hermanos nos mostraba simplemente la realidad de unos trabajadores franceses saliendo de la fábrica después de un día de trabajo. Así continuaron con sus demás obras, dando a conocer hechos de cómo se vivía en los diferentes lugares del mundo, gracias a la ayuda de sus diferentes operadores de cámara. Asimismo, lo empleaban como instrumento para criticar algunos regímenes políticos del momento.

Y no sucedió solo con ellos, fue así en los diferentes cineastas primigenios: desde la Escuela de Brighton -iniciadora del lenguaje fílmico- hasta los grandes creadores del género. Es el caso de Robert Flaherty, Dziga Vertov, Alberto Cavalcanti, Walter Ruttmann, John Gierson, Paul Strand, entre otros. Pero ¿qué caracteriza y hace a un producto audiovisual documental?

Una definición que encaja es el concepto noticiario (newsreel): “documental es aquel filme que no es de ficción, es decir, que ha sido realizado sin actores, y con el ánimo de mostrar un hecho real en imágenes.” Podemos dividirlos en dos clases. Por un lado, los de actualidad, “newsreels”, que muchas veces son parte de una serie completa como es el caso de Pathé News, Paramount, Fox o Garamount, que se editan con una periodicidad fija (habitualmente uno o dos números semanales). Por otro lado, los reportajes informativos, que habitualmente se encuentran en los noticiarios y más tarde en los documentales. Esta sería la “materia prima” cinematográfica, aparentemente la más próxima a la realidad histórica.

Por su parte, los llamados documentales o “documentary film” se dividen en los filmes didácticos, es decir, películas para la enseñanza. Hecho por profesionales como historiadores y pedagogos que están pensados para ser expuestos en centros docentes, aunque no es el único lugar donde se proyectan. En ellos se incluyen imágenes de archivo (de diversos noticiarios y/o reportajes. Además de filmaciones propias. Documentales creados con la idea de mostrar parte del temario, es por ello que gran parte de su audiencia sean alumnos. Un claro ejemplo serían los filmes de Marc Ferro: 14 cortos producidos por Pathé Cinéma y tres largometrajes.

Por su parte encontramos los filmes de montaje, también llamados “reconstitución histórica” en los cuáles se muestra la realidad combinando entrevistas. Son películas de no ficción que se crean con la intención de mostrar un suceso real sin necesidad de usar a personas que interpreten a esos personajes históricos. Estos filmes toman elementos de la realidad, bien directamente o de segunda mano, utilizando materiales ya existentes o bien combinando ambas posibilidades, para ofrecer una visión en teoría más realista de un acontecimiento concreto. El montaje en este caso adquiere mayor relevancia, debido a que se incluyen imágenes de antiguos noticiarios.

Dentro de estos podemos diferenciar 3 tipos según si los materiales utilizados son o no de primera mano. Primero encontramos en los que el realizador y el equipo técnico captan directamente la realidad, evitando así el doble proceso de montaje. Un ejemplo para destacar sería el documental de Luis Buñuel “Tierra sin pan (1933)”. Segundo cabe mencionar los credos a partir de otros materiales, rodados por un equipo diferente anteriormente. En este caso el propio equipo se encarga de seleccionar y montar dichas imágenes, como es el caso del documental “Canciones para después de una guerra (1971)” de Basilio Martín Patino. Y, por último, la clasificación más empleada es la de combinar ambas opciones, es decir, graban su propio material y acceden a material previamente grabado por otros equipos. Un famoso ejemplo es “Nuit et Brouillard (1956)” de Alan Resnais.

Para finalizar me parece relevante destacar el poder que tiene la vista del realizador en los documentary films, debido a que selecciona qué materiales de la realidad incluir. Asimismo, me parece un género muy relevante puesto que nos plantea una nueva forma de conocer la historia, ver las diferentes perspectivas y ciertas imágenes directas de lo sucedido.

 

Bibliografía:

 

https://www.nuevarevista.net/actualidad-del-documental-historico/

 

https://www.redalyc.org/pdf/737/73715084007.pdf