3.1.- Historia y evolución de la radio

A lo largo de la historia de la radio española ha habido innumerables tipos de contenidos.

Desde que el 14 de noviembre de 1924, a las seis y media de la tarde, María Sabater realizara la primera transmisión de la historia de España en Radio EAJ-1 Barcelona, muchos han sido los géneros que se han utilizado a modo de entretenimiento y de conseguir tener el oyente enganchado al transistor a todas horas. Hoy, en esta entrada del blog del tercer curso del doble grado de periodismo y comunicación audiovisual de la Universidad Miguel Hernández, un servidor va a dar un repaso a los géneros radiofónicos que más le gustan (o le han gustado a lo largo de la historia) y ejemplificar dichos modos de hacer radio con locutores concretos que se hacen valer de una puesta en escena y un tono de voz muy personal para ganarse la atención del público.

Humor y publicidad.

Humor

El humor en la radio ha pasado por varias etapas a lo largo de su historia. Tardó en entrar como género en la radio, ya que, no me refiero con “humor” a alguien que locute un partido de fútbol y lo haga con chanzas y ocurrencias graciosas. No. Me refiero a ese espacio radiofónico creado y ejecutado por humoristas que su único objetivo es hacer reír a la gente. Hay dos tipos de espacios humorísticos en la radio muy definidos. El primero es el espacio radiofónico en el que hay uno o dos presentadores que su locución gira en torno de una narrativa donde a través de recursos radiofónicos –imitaciones, bromas telefónicas, jingles, etc.– crean un espacio de media o una hora en el que solo trabajan los presentadores y el técnico de sonido. Las Noches de Ortega o El Grupo Risa – en la Cadena SER y en la Cadena COPE, respectivamente – son ambos ejemplos de los que me hago valer para poner nombres y apellidos a este género. También son válidos esas secciones matutinas en los programas matinales en las radios punteras españolas, en las que un humorista realiza lo que hacen en su respectivo programa, pero de forma reducida –de hecho, a parte de El Grupo Risa, los presentadores también tienen su sección matinal en el programa de información de La Mañana en COPE con Carlos Herrera–.

Y otro tipo de forma de hacer humor en la radio es, literalmente, juntar a un grupo de cómicos en la mesa y realizar una tertulia, alguna vez con secciones muy simples, alguna vez incluso sin escaleta. Donde lo que manda es la improvisación. Es un tipo de humor relativamente nuevo y creciente, es decir, está en auge. Y como todo lo que lleva innovación radiofónica en los estudios de radio españoles pertenece a la Cadena SER, pues ellos apuestan más por este tipo de formatos: La Vida Moderna, Nadie Sabe Nada, El Grupo, No Puede SER, Buenismo Bien

Publicidad

Si hay que hablar de publicidad en la radio, hay que hablar de un nombre propio: Pepe Domingo Castaño. Él dio un vuelco a la publicidad en la radio e hizo que los anuncios se les quedaran en la cabeza a los oyentes –y a sus 78 años, lo sigue haciendo–. El tiempo en la radio es dinero y antes –y ahora, a no ser que seas Pepe Domingo– los anuncios eran piezas grabadas y montadas con una duración determinadas según establecía el contrato anunciante-emisora. Pepe Domingo revolucionó la manera de anunciarse.

Él trató de hacer jingles, canciones pegadizas, eslóganes frescos y melodías que se quedaran en el imaginario colectivo. Desde entonces, ha creado escuela y, hoy en día, sigue trabajando para muchas marcas que quieren estar en la radio. La idea surgió a raíz de una crítica que hizo en la Cadena SER, a un anunciante. Como decía antes, los anuncios en la radio eran grabaciones con una duración fija según lo que establecía cada contrato. Pepe Domingo no podía entender que un anunciante gastara una fortuna en publicidad y luego el anuncio no llegase a los oídos de la mitad de la audiencia. Se quejó a un anunciante y él me respondió que era una tontería quejarme, que cuando grababan comerciales, lo hacían con una duración determinada y no podían cambiarla. Se dio cuenta de que si la emisora podía grabar una pieza con la música y el eslogan que él quisiera, podría modificar la duración en función de lo que él necesitara. Fue el primer jingle de la Cadena SER y lo grabó en el estudio del Hotel Ritz, en Madrid.

Al fin y al cabo, las marcas que más han sabido aprovechar este nuevo canal de comunicación son las que han sabido adaptarse al tiempo. El tiempo en la radio es dinero y todo lo que tenga que ver con la radio es más rápido que cualquier otro medio.