Desde que Guillermo Marconi realizara la primera retransmisión de radio en 1899 a lo largo del Canal de la Mancha, la radio se convirtió en el medio de comunicación más importante del mundo hasta los años 50, cuando la televisión surgió como nuevo medio. Desde principios del siglo XX, la radio se expandió rápidamente por todo el planeta, haciendo mayor acto de presencia en los hogares de los países más desarrollados.

En España, la llegada de la radio fue algo más tardía que en el resto de los países de nuestro entorno, en un contexto histórico marcado por la dictadura de Primo de Rivera, fue en 1924 cuando se produce la primera emisión radiofónica en la historia de nuestro país. La radio desde que se emitió fue la pionera Radio Ibérica, la cual surgió de la unión entre la Compañía Ibérica de Telecomunicaciones y la Sociedad de Radiotelefonía Española. La historia de esta radio se remonta un año antes, a 1923, cuando se instaló en Madrid un estudio donde comenzaron a realizar emisiones experimentales con un transmisor de 500 vatios, diseñado por los Hermanos de la Riva. Sus emisiones se realizaban normalmente los jueves y los domingos por la tarde, y su parrilla de programación constaba de programas musicales, culturales y mensajes comerciales, además de la narración de cuentos para niños, lecturas, recitales poéticos y conferencias. Uno de los hitos que logró Radio Ibérica fue la emisión el 22 de diciembre del sorteo de la Lotería de Navidad desde la Casa de la Moneda, además de conseguir que su longitud de onda fuera suficiente como para que sus emisiones se escucharan en ciudades como Barcelona, Valencia, Zaragoza o Sevilla.

No fue hasta el 12 de mayo de 1924 cuando Radio Ibérica abandona la idea de emitir los jueves y domingos para pasar a emitir todos los días, en los que incluía conciertos del Teatro Real. Tal fue el éxito que cosecharon que la demanda de receptores se multiplicó y en los talleres de Radio Ibérica se fabricaban más de 1500 receptores al mes.

Un año después, en 1925, Radio Ibérica ya emitia boletines informativos que incluía crónicas, noticias, sucesos, información provincial e internacional, noticias culturales y de sociedad. Pero en España, como en otros países, los intereses económicos de los medios establecidos (en concreto el medio escrito) chocaron con el fenómeno emergente de la información radiofónica, y los primeros ensayos de Radio Ibérica fueron duramente criticados en los medios escritos, por lo que la emisora ​​tuvo que abandonar su deseo de emitir boletines informativos los domingos, ya que los periódicos argumentaban que así se rompía el descanso dominical.

Sin embargo, se manifestaron problemas económicos y de competencia con otras emisoras, por lo que tuvieron que abandonar las emisiones diarias. Aunque a partir de aquel momento, Radio Ibérica continuó emitiendo regularmente, cuando tuvo lugar la regularización de la radiodifusión comercial en España, la emisora no solicitó el permiso adecuado y terminaron relegada al sexto puesto en las emisoras nacionales, hecho que provocó la caída en 1926 de Radio Ibérica, dejando de emitir para siempre.

Dejando a parte la historia de Radio Ibérica, la importancia de la radio en aquellos años hizo que el gobierno dirigido por el dictador Primo de Rivera no tardara en convocar la Conferencia Nacional de la Telegrafía Sin Hilos, que tuvo el objetivo de establecer un marco de futuro a través del Reglamento de Radiodifusión. Los responsables de establecer la legislación al respecto fueron varios, entre ellos los Ministerios de Guerra, Marina, Gobernación, Instrucción Pública y Trabajo, aunque siempre asesorados por organismos como a Compañía Nacional de Telegrafía sin Hilos, la Compañía AEG, la Ibérica de Electricidad, la Compañía Radio Ibérica, las Compañías de Radiotelegrafía Francesa, la Federación de Radiotelegrafistas españoles, la Asociación de la Prensa, la Agrupación de Constructores de material eléctrico de España y el Radio Club España.

Así, se comenzó a crear un caldo de cultivo para que el medio radiofónico pudiese expandirse por nuestro territorio, y en el verano de 1924 se comenzaron a otorgar las concesiones de emisión a EAJ-1 Radio Barcelona, EAJ-2 Radio España de Madrid, EAJ-3 Radio Cádiz, EAJ-4 Estación Castilla y EAJ-5 Radio Club Sevillano.

Durante los siete años siguientes, el panorama radiofónico en España se transformó a gran velocidad, tanto en cantidad como en calidad, ya que el número de emisoras fue creciendo a la vez de que la programación iba mejorando. Ya en 1930, con la iniciativa de la Asociación Nacional de radiodifusión, nace EAJ-15, Radio Asociación de Cataluña, que emitirá su programación 3 horas al día en catalán. Este hecho provocó una gran competencia entre las dos emisoras catalanas más importantes, y finalmente Radio Barcelona decidió hablar a su audiencia también en catalán.

Finalmente, he decidido escoger este tema ya que estoy muy interesado en conocer la historia de la radio, en especial aprender de los orígenes más remotos. Además, me resulta fascinante la historia de la radio en España en aquella época y como el gobierno quiso utilizarla a su favor como medio propagandístico debido al gran éxito que estaba teniendo entre el público.

Enlaces:

http://elmediosonoro.blogspot.com/2008/11/radio-ibrica.html

http://recursos.cnice.mec.es/media/radio/bloque1/pag3.html

https://museopostalytelegrafico.es/efemerides-12-de-mayo-de-1924-radio-iberica-comienza-a-emitir-su-programacion-diariamente/

https://ocw.uma.es/pluginfile.php/1924/mod_resource/content/0/Tema1_01_doc.pdf.pdf