Epígrafe 4.3 – El documental. Tipos de documentales. El documental como documento cultural

Minimalismo: las cosas importantes’ es un documental sociocultural de 2016, dirigido por Matt D’Avella y protagonizado por Joshua Fields Millburn y Ryan Nicodemus, dos treintañeros y amigos de la infancia, pioneros del movimiento minimalista en Estados Unidos y creadores de la web theminimalists.com, además de escritores y conferencistas expertos en el minimalismo.

Ryan Nicodemus nació en Knoxville (Tennessee), en 1981 y actualmente vive en Los Ángeles. Creció en Ohio, en un hogar disfuncional donde no tenían mucho dinero. Más tarde consiguió vivir el sueño americano y trabajar para poder ganar dinero (igual que hace el resto del mundo) y así poder consumir, pero terminaron despidiéndole. Esto puede parecer que fue lo peor que le pasó, pero, al contrario. Que le despidieran le sirvió para cambiar el enfoque de su vida, de su día a día. ¿Cuál fue este cambio de enfoque? Ryan comenzó a ver la vida de una manera más significativa teniendo menos cosas y guiándose solo por las pasiones, las verdaderas pasiones.

Por otro lado, Joshua Fields Millburn nació en Dayton (Ohio), en 1981. Creció en la pobreza y esto le hizo pensar que la ausencia de felicidad era debido a la falta de dinero. En consecuencia, cuando cumplió la mayoría de edad decidió no ir a la universidad y comenzar directamente a trabajar, subiendo de nivel para así ganar cada vez más dinero, pero se dio cuenta de que seguía sin tener la felicidad que siempre había deseado. Poco después le llegaron dos contratiempos (la muerte de su madre y la ruptura de su matrimonio) que le hicieron pensar sobre el futuro y así fue como se cruzó con el minimalismo. Al igual que Ryan, Joshua abandonó el sueño americano, con la diferencia de que a Joshua no le despidieron, fue el quién lo dejó y se mudó a Montana. De vez en cuando le gusta experimentar y prescindir de Internet, teléfono, compras, televisión…

Joshua fue el primero en llegar al minimalismo y dejar todo lo innecesario atrás, «Abandoné todas aquellas cosas que introduje en mi vida sin cuestionarme nada». Poco después, Ryan se dio cuenta de lo feliz que era su amigo desde el cambio. Entonces le invitó a comer y le pregunto ‘¿Por qué demonios eres tan feliz?’, Joshua se pasó 20 minutos hablándole del minimalismo y decidió unirse a él. El trabajo duro y la recompensa económica dejaron de tener sentido para Ryan y Joshua, y por ello cambiaron el dinero por tiempo. Dejaron todo para dedicarse a motivar y explicar su actual historia propia, una donde sus vidas pasaron a ser mejores, más sostenibles, conscientes…

Este documental plantea reflexiones sobre el exceso en el consumo, contando con los testimonios de expertos como psicólogos, neuropsiquiatras, científicos, arquitectos, empresarios, sociólogos, economistas, escritores…, y mostrando los beneficios de que menos, es más. Todos terminan opinando que la felicidad no se consigue con la acumulación de objetos; al contrario, este exceso de consumo puede tener como consecuencia la insatisfacción, depresión, estrés…

Además, muestra conferencias, charlas y encuentros de la gira de Joshua y Ryan por Estados Unidos, donde hablan de su libro ‘Everything that remains a memoir’ y del concepto minimalismo.

El documental tiene como objetivo demostrar que el exceso de consumo es una adicción y este se refuerza día a día a través de los medios de comunicación, del cine, de la publicidad… Productos audiovisuales donde aparecen personas que se vuelven locas y pelean por conseguir aquello que quieren solo por el hecho de tener lo que otro no tiene y/o tener un mayor estatus social. Situaciones que no son ficticias, si no que se dan en la realidad, sobre todo días de rebajas como el Black Friday.

Minimalismo: las cosas importantes’ invita al espectador a olvidar las falsas necesidades y no dejarse llevar por el exceso publicitario. Hay que aclarar que ambos protagonistas no quieren que los espectadores dejen de consumir, ellos sugieren que aprendan a vivir con lo suficiente.

Hay intervenciones muy interesantes como las de Rick Hanson, Shannon Whitehead y Cartney Carver. Cada uno de ellos aportan información y casos muy relevantes:

En primer lugar, el neuropsicólogo Rick Hanson afirma que el dinero puede llegar a comprar parte de la felicidad. Un estudio demostró que un mayor bienestar material ayuda a tener un mayor bienestar psicológico, pero hasta cierto punto ya que llega un momento en el que tener más dinero no asegura ser más feliz.

En segundo lugar, Shannon Whitehead, fundadora de Factory 45 (una escuela de negocios online para empresarios y fabricantes en Estados Unidos), habla de cuando antiguamente las abuelas compraban ropa que iba a ser para todo el año, como mucho dos veces debido a las estaciones, una tanda para ropa más de invierno y otra para cuando hace más calor. Pero, sin embargo, ahora llegan a haber más de 50 temporadas a lo largo de un año.

Por último, también interviene Cartney Carver, fundadora de Poryecto 333, experimento que consiste en utilizar solamente 33 prendas y accesorios como máximo durante 3 meses.

A lo largo del documental aparecen situaciones curiosas e irónicas que ponen en duda la manera en la que viven los estadounidenses. Uno de los ejemplos es una serie de mapas de calor de casas estadounidenses que demuestran que muchas de las habitaciones como el comedor, porche y cuarto de estar casi no se utilizan. Esto da lugar a cuestionarse el precio que se paga por esos metros “fantasma”.

De hecho, en un momento del documental se habla de que los últimos años el tamaño de las casas ha aumentado y, además, ha aparecido una industria que se encarga de almacenar las cosas que no caben en los hogares.

Según la RAE, el minimalismo es una corriente artística que utiliza elementos mínimos y básicos. Pero, para concretar, también se podría decir que es un concepto que hace referencia a un estilo de vida simplista donde se reducen las pertenencias materiales y se cuenta con lo básico e indispensable; hay que aclarar que no se centra directamente en tener menos, si no que en darle sentido a lo que tenemos. Por lo tanto, si tenemos algo que no aporta en nuestra vida y tan solo existe sin más, debe ir fuera. Es una manera de alejarse del exceso que no aporta felicidad; una búsqueda de una vida que tenga sentido y que vaya más allá de las posesiones, dándole importancia a otras cosas como las personas, las experiencias, la libertad, la salud…

A lo largo del visionado surgen muchísimas preguntas que se van contestando según pasan los minutos. ¿Necesitamos vivir realmente como vivimos?, ¿cuántas cosas realmente necesarias tenemos en nuestro entorno?, ¿seríamos capaces de vivir en otro tipo de alojamiento como en casas enanas, como las que se aparecen en el documental?, ¿cómo puede ser que en esta época, donde los niveles de vida son los mejores de la historia, anhelamos tanto y nunca tengamos suficiente?,¿somos realmente felices con tanto?, ¿seríamos capaces de hacer borrón y cuenta nueva?, ¿podríamos vivir de una manera en la que tuviésemos lo justo y necesario para tener una existencia feliz, sin dejarnos llevar por la publicidad, por el consumismo…? En definitiva, ¿seríamos capaces de vivir una vida minimalista?

Respondiendo a la última pregunta, diría que sí sería capaz de vivir una vida minimalista. Pero el acto de deshacerme de gran parte de lo que tengo actualmente (que es mucho) quizás sería algo complicado, ya que, a cualquier cosa, por mínima que sea, le doy sentido, aunque sea un sentido absurdo (solo con decir que llevo una anilla de cerveza colgando de uno de mis pendientes y a veces uso una cordonera de cinturón…). Me gusta sacarle partido a todo lo posible y eso deriva a siempre recurrir al ‘por si acaso’, ‘lo guardo porque seguro que en algún momento le doy un uso’.

Desde pequeños nos enseñan a trabajar duro para así en un futuro poder tener un buen puesto de trabajo, una casa lo más grande posible, el mejor coche que se pueda, el último modelo de móvil del mercado, toda la ropa que está de moda… Pero el problema está en que le quitamos importancia a aquello que de verdad la tiene, las emociones, experiencias, personas… Sí que es cierto que no todas las personas pueden permitirse el lujo de dejar el trabajo, buscar algo mejor e ir a contracorriente, dejando atrás lo normativo.

En mi caso, necesitaría un punto de inflexión, el momento en el que comenzase una nueva vida, por ejemplo, independizarse y obligarse a clasificar qué es importante y qué no lo es. También es cierto que no es necesario esperar a que llegue el momento de independizarse y podría empezar a clasificar ya, pero eso es más complicado.

Es curioso e irónico a la vez porque esta entrada la estoy escribiendo en una casa enana como las que aparecen en el documental. Es una casa de apenas 34,5 metros cuadrados en medio de una tranquila zona montañosa, y cuenta con lo mínimo y necesario. Pasar el día en este lugar me ha dado ganas de vivir en un lugar tan minimalista en un futuro, ya que teniendo tan poco disfrutas de todo al máximo, de la casa y de su entorno. Pero después tocará volver a la otra realidad, a la del día a día; una casa que multiplica su tamaño y que representa lo contrario a minimalismo. Pero lo que me alegra es que a través de este documental y de haber pasado el día en este lugar, sé que en un futuro quiero intentar aspirar a una vida más minimalista, todo lo minimalista que sea posible.

En conclusión, ‘Minimalismo: las cosas importantes’ sugiere la existencia de un modo de vida alternativo al típico, un modo donde las personas están por encima de las cosas y la felicidad no depende del dinero ni del consumo, donde hay menos frustración, más tiempo libre, más crecimiento… Siempre teniendo en cuenta que no es una vida perfecta y que puede ser difícil, pero consciente.

 

Bibliografía

https://www.ideasimprescindibles.es/minimalismo-documental/

https://www.theminimalists.com